El término “conjuntivitis” describe la inflamación de la
conjuntiva (membrana transparente que recubre el interior de los párpados y la
esclerótica). La conjuntiva produce sustancias lubricantes para mantener la
superficie del ojo húmeda y protegida, cuando se irrita sus vasos sanguíneos se
hacen grandes y el ojo puede aparecer “rojo” (MedLine)
Entre sus causas están la infección bacteriana o viral, las
alergias, sustancias irritantes… (Más información aquí)
Como siempre, ante la duda, hay que consultar al
profesional, que sabrá reconocer las causas, hacer un buen diagnóstico y
decidir si hace falta medicación específica. Y siempre será interesante una
buena prevención: lavarse bien las manos, no reutilizar toallitas o pañuelos, utilizar
correctamente las lentillas, no compartir cosméticos o no utilizarse una vez
pasada su fecha de caducidad, evitar lugares con mucho humo, cuidar la higiene
de los ojos, su descanso…
Por supuesto, la infusión de manzanilla será nuestra gran
aliada. Hay que colarla muy, muy bien para que no queden restos de las flores
que puedan causar mayor irritación. Luego se realiza un baño de ojos o se
aplica en compresa, y listo.
Los aceites esenciales NUNCA deben utilizarse en los ojos. Serán
una opción si ante infecciones repetidas queremos crear alguna sinergia que nos
ayude a reforzar el sistema inmunológico. Para la conjuntivitis y el cuidado de
los ojos, la mejor opción que nos brinda la Aromaterapia son los
hidrolatos (aguas florales)
Para párpados inflamados o para refrescar los ojos en caso
de conjuntivitis:
- 70 ml de hidrolato de Manzanilla.
- 30 ml de hidrolato de Lavanda.
Se humedecen compresas en la
mezcla y se aplica 3 veces al día.
Recordad que el hidrolato de Aciano también irá muy bien en compresas en caso de párpados inflamados y ojos cansados.
Recordad consultar al profesional y probar con cuidado los
hidrolatos o las infusiones, porque podrían haber problemas de reacciones alérgicas.
¡Un saludo aromático!